miércoles, 30 de septiembre de 2015

Sin intención de admitirlo

Tengo miedo
de que mi cuerpo esté invadido por otra muerte
y que me corra entre glóbulos rojos
y glóbulos muertos
y entre plaquetas
que no cerrarán la herida.
De que la verdad venga con la fiebre.

Temo una línea de más
en el examen médico
y temo que se acerque uno complejo a los seis meses
y luego otro
y otro
y al final ya ninguno.

Me aterran la llaga en la boca
y el semen,
las ingles inflamadas,
no tener estómago que aguante una hora
ni la incertidumbre en la sangre.

Me turba encontrar algún amante ocasional
y pensar en lo podría haber sido,
más aún reencontrarme con mis amantes de siempre
y que aún conociéndonos nuestras historias
juguemos a la ruleta rusa
con cinco balas
en la recámara.

Me amedrenta perder un abrazo
y ganar una mirada compasiva,
que me digan que tengo lo que merezco
o que nadie merece cargar con eso en el tuétano.
Volverme en un ataque de lujuria un asesino.

Me acobardo ante la sífilis,
ante la neumonía, la diabetes,
el filo de un cuchillo de cocina.
Ante la cuerda en donde cuelgo la ropa.

 Me horroriza que más se vuelva menos
y llevar en cada ojera
el deseo de ganarle por una vez a la parca
y cargarme al hijueputa que se dice sano;
me horroriza llevarlo hasta que la sed de venganza
se congele y deje que la vida sea también su condena.

Tiemblo porque cada vez que despierto con ganas de vivir
acudo a solicitar el análisis
y despierto el día de la cita y la angustia
me impide salir de la cama.
Porque prefiero saber que algún día moriré
y no que ya estoy muerto.

martes, 5 de mayo de 2015

Nemo Vals

Léase preferentemente mientras escucha
Howl Moving Castle Main Theme
por Joe Hishaisi



Don't say my name,
está prohibido.

Si una sola sílaba saliera
suplicante de tu boca
-those thin lips, that tongue-,
mis pies se volverían tan tuyos
que seguirían el ritmo de tu vals por siempre.

Eternally.

 No digas mi nombre,
it's forbidden.
La tierra se vuelve del tamaño de un puño,
de tu puño,
del tamaño de tu corazón,
y ya puedo sentir que late,
la siento latir,
dejarme                  y volver                y dejarme.
No dejes que se detenga.
Sigue.

Sigue.

Sigue.

Una palabra tuya
bastará para atarme.
Vuelve.
Nombra la roca
y la cargaré en mi espalda;
la cadena y una prisión completa.
Nombra el silencio
y mi silencio será tuyo;
la palabra y te daré mi voz.
Don't You know I would die for You?

Nómbralo todo,
menos a mí.

El cielo se vuelve un puño
y amenaza tormenta.
No lo digas,
escampa,
toma mi mano,
take this waltz.
Guíame al Paraíso,
 nombra al cielo
y la cama edén,
ponle nombre a una silla
y el trono divino.
Pídeme dormir la siesta
y la muerte eterna cerrará mis ojos
y si me pides que los abra,
renaceré.

El viento se vuelve un puño.
Will You even be here?
Quédate otra noche,
o pídeme que vaya contigo.
Si tu lengua lame el aire,
arremolina mi vida sólo para ti.
Si tu voz sombra,
mi sombra quedará atrapada en tus labios,
pero no digas a nadie,
-ni siquiera a mí-
mi nombre.

My name is mud,
no ensucies
-por piedad-
la constante melodía
that fills the air all around You.
Lava mi pena en tu silencio
y constriñe mi vida entre tu paladar y tu lengua.
Sálvame.
 Que tu silencio sea mi delirio
y la palabra que pienses
mi ritmo vital.

Que una espiral de tu voz
consuma mis pensamientos
y el timbre que desprendes
llene mi mente.

Que lata entre mis oídos
y mi esternón.
Que resuene all the time...
All the time...
All the time...
Todo el tiempo que estuviste conmigo.

Prométeme que si el viento sopla
no te llevará con sigo,
Y que si se abre tu mano
 seguirás mi voz
como sigo yo la tuya
aunque seas sólo el viento que apremia
hacia el fondo de un precipicio.
Untill the end of the broken time.

Dímelo todo
y repítemelo en ciclos de tres
because three is the rhythm of our lifes
y la vida nuestra es un puño que se cierra.

La tierra late,
el cielo late,
el aire late,
el agua es un puño
que inside of me mana
el beat de la vida
y se me escurre entre el sudor
y el llanto
and everything that falls out
como una catarata
que se desploma sobre un bosque en llamas.

Y las semillas revientan al abrirse tus labios
y nace nueva vida de las cenizas de tu voz quemada.
Hell becomes a fist,
y las llamas aprietan mi alma,
y tu voz cae y la apagan
y crece un árbol enorme dentro de mi cuerpo
si tu dices simplemente raíz
y me estrangulo
y reviento
y renazco de las cenizas.

Y tu mano se vuelve un puño
y si te molesta que siga tus pasos
no hay más que hacer,
este el el baile
que nos tocó interpretar
y te seguiré hasta que la música se detenga.
Don't You say my name!

Si tu voz tiembla
yo caigo
y si te falta el aliento
caigo en coma.
Porque todo es caer
si hablas con gravedad
y a cada cuerpo le llega su hora
si cuentas el tiempo
que transcurre.

Si pones un punto y terminas la historia,
me cae como un puño
y el ritmo termina
and there's nothing left to talk
si me quitas el nombre
o me llamas final.

viernes, 18 de julio de 2014

Otra canción triste

...para sentirte acompañado
cuando te sientes vencido...
Enrique Bunbury
En un momento dado
 ahí estás,
frente a tu padre.
 Y le gritas que quieres morirte
y lo acusas de darte la vida.

Amanece y la tierra aún gira
y te hace viajar veloz
a través el universo
que tampoco muere
y quieres vomitarlo todo.

Y discutes con tu esposo
y tu amante te tira la plancha
y conoces a alguien por la calle
y decide que mejor se va a dormir a su casa,
sólo.

Anochece y la lluvia también cae
y sientes que tus huesos caen
y que necesitas romper los aparadores
para que los vidrios y la sangre
también caigan.
All are there, for ever falling,
falling lovely and amazing.

Y te vas a dormir
pero la cama ya no es tu cama
y la almohada tiene sus propios sueños
y no los comparte contigo
y una pesadilla regresa
de cuando aún no tenías ni doce años
y despiertas llorando
y sin cobija.

Aún no amanece,
te ocultan un techo
y sus telarañas
de las nubes negras;
abres la regadera
vuelve la lluvia
y con el rastrillo
te cortas al rasurarte.

Y la sangre cae y se desvanece
y piensas que debería haber más
y sientes que no deberías pensar
que no fue por error la herida
y que debería haber sido más profunda.
En la femoral o en el cuello.
De muerte.

Pero te pasas un poco de agua
porque te sabes incapaz de matarte
o de hacer cualquier otra cosa.

Y en un momento dado
ahí estás,
frente al espejo.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Sunken Birthday Cake

"I dream too much
and spend my day
like a sailor lost at sea."
Sunken soilder ball- Agua de Annique

Hoy es un día de esos
en los que quisiera dormir en un solo pestañeo
veintiséis paralelos,
navegar la eternidad sin sueños.

Mientras todos tienen un huracán en la cabeza
o entre las cobijas o las cejas,
ansío permanecer quieto.
Fui aire, volador,
hoy no me siento capaz de soplar
ni siquiera la próxima vela.
Aún con las anclas levadas,
sin viento interno,
sin anima motor,
no sé cómo cruzaré los mares
del próximo año.

I will go down with this ship,
así tenga que sabotearlo
poco a poco.

domingo, 27 de octubre de 2013

Lightseeker

Mantenme encendida una luz
por si volviera de noche
o no supiera encontrar el camino.
Déjame una luz,
la del pasillo.

Si quieres deja también una bala
-no te preocupes, yo llevaré el arma
con la que murió el último de mis amigos
por su propia mano-
o una cuerda debajo de la viga
que alguna vez sostuvo mis sueños.

Prende una estrella
o quema un poema de Storni
o reza por mi una oración ente tu dios,
para mí da lo mismo
siempre y cuando seas tú
y nadie más
quien lo haga.

¿Te dije te quiero?
Creo que no,
no había motivo
para una mentira
(ahora te quiero).
Poco a poco oscurece,
en donde estoy el día no dura tanto,
¿me enciendes un faro?

Acá los faros están cubiertos de salitre,
hace mucho que no fumo,
ya lo sabes, la nube de muerte en mis pulmones
ese afán de no dejarla gobernarme.
¿Quieres que te lleve una flor
cuando pase a donde estás?
La dejaré junto a tu cama antes de irme.
Prométeme que cuando la veas
llamarás a alguien más para que descubra mi cadáver.
No salgas de la habitación al escuchar el disparo
o al oír como cruje el techo.

Por ahora, mantenme encendida una luz,
cuando yo llegue,
la apago.

C.A.E.

sábado, 17 de agosto de 2013

Amarás a Dios...

Para A. M. Q.

A veces me pregunto por qué se enoja Dios con los hombres,
qué es lo que en realidad lo irrita
y levanta en la tierra tribulaciones.
Lo juro. No lo sé.

¿Será que es tan celoso que cree que lo engañamos cuando parpadea
y que, por lo tanto, por eso estamos pendientes de sus ojos?

Me pregunto también si será por todo lo que nos ha dado.
Si desde un principio sabía que nada podíamos ofrecerle
además de nuestra adoración.

Levantamos templos sólo para él dentro de nuestro corazón
y cada mañana nuestro primer pensamiento es para él.
¿Le parecerá que es muy tarde?
¿Será por no madrugar que Dios se enfurece con nosotros?

A veces creo que Dios siente que no lo amamos,
que es muy mayor para nosotros,
entonces nos envía señales de que deberíamos amar
a un Dios de nuestra edad.

A veces Dios se enoja con el hombre
y entonces me pongo triste y me pregunto
qué es lo que hago mal.
¿Acaso creer que es Dios?

[C. A. E.]

sábado, 10 de agosto de 2013

Electro-outburst zaffari

Déjame escribirte un arma
que dispare tu locura,
una idetenible bala
que sangre
el lado frío de tu

m e  m o r í a

No estás aquí
y me cansé quizá de no encontrarte
entre las sabanas
y las conchas se secaron
en un cementerio de calcio,
en una salina
¿o era una capa de polvo helado
derecho de la cama?
Se perdieron también los leones de la escarcha.

Permíteme escriverte una ves más,
regresa y prometo no comenzar
un tiroteo
de palabras y tinta,
no marchitarme,
una vez al menos,
no recomenzará la cacería.

No estabas tampoco allá
y me agoté de la clepsidra electrónica
que ornaba tus lacrimales
cada ver que discurríamos,
¿re cuerdas que no te golpeaba?
nunca te he golpeado
¿re cuerdas cómo me atabas?
Me dejaste sujeto a una oración
que tus labios no volvieron
a rezar,
a un reloj que no podía dar un paso más.
Se fundieron tus pisadas de cebra
entre las sombras del circuito peatonal,
seguiste anidando.

Consiéntemelo y crearé un explosivo
de construcción mas iva
sin pasarte factura
de los huesos rojos,
ganados de fragmentación
sin la llave que sierre la puerta
por la que no has vuelto a entrar,
aquella que jamás abre.

¿Ocaso no piensas regresar,
saludarme con un ola?
paisajar en el lecho
que -me río- ya no has habitado.

La tormenta lo modificó todo,
cambio climático.
Tendré que morir
si sólo sobrevive el más apto.
Camuflaste la respuesta al irte
y desalmaste mi entorno.

Déjame escri...
ese fue mi error,
pedirtelo cuando no comprendías
el modo en que quería que te quedaras.